miércoles, 20 de mayo de 2020

Nueva reseña sobre Sueños de escayola

Os comparto esta nueva reseña sobre Sueños de escayola que me llegó hace unos días. Es extensa, pero certera y emocionante; al menos para mí lo és.
(Las reseñas y comentarios sobre esta novela me abrigan el corazon como pocas cosas más)
La ha escrito Ximo Segarra Acapu, un ilustrador y historietista, también escritor, al que admiro.

En una breve acotación previa diré que hace apenas un año ni siquiera conocía a Ximo personalmente, sí su obra, que siempre me parecíó original y, en ocasiones transgresora. De las que vale la pena conocer.
Un día le escribí pidiéndole colaborar con un dibujo para Cometas cruzando el sol, él aceptó, sin dudarlo y sin conocerme.
También hace muy poco, cuando apenas llevaba leído medio libro, ya escribió otra interpretación sobre estos Sueños de escayola para acompañar una de sus ilustraciones, que también compartí aquí.
Ximo, es un gran artista, pero sobre todo es un gran tipo.
Gracias, amigo...

lunes, 4 de mayo de 2020

Reseña sobre "Cometas cruzando el sol"


He recibido un comentario que me ha emocionado especialmente sobre Cometas cruzando el sol, este libro de relatos que tantas satisfacciones me está dando.
Lo ha mandado Pepa Morató, una escritora que, entre otras obras, ha publicado una interesante y entretenidad novela de intriga titulada "No te fíes, Sarah Miller, escrita en un difícil equilibrio a seis manos junto a otras dos autoras. Un thriller absorvente, ágil y altamente recomendable que disfruté hace unas pocas semanas. 
Esta es la reseña:

domingo, 3 de mayo de 2020

Día de la madre



 Mamá querida ¡Cuánto te echo de menos!

Cuánto añoro tu fortaleza de mujer chiquitilla y tenaz, el beso en la frente, el termómetro bajo la axila, el azúcar tostado, las caricias que aliviaban fiebres y el pañuelo sanador de oraciones.
Añoro tu entereza, derrotando cada día las escaleras de aquellos cinco pisos, cargada de compra, con el coraje del corazón, sin queja, nueve bocas siempre fueron muchas.

Fíjate, mamá, incluso ahora me llega a la memoria aquellas horas en el Niño Jesús, un niño herido al que contabas fábulas sencillas al vaivén de unas piernas de sarmiento mecidas por la corriente, calmando el dolor con tu sonrisa; y recuerdo tus canciones, esas coplas bellas que susurrabas solo para mí. 

Mamá querida, ¡hoy podría decirte tantas cosas! Que siento en el alma las pesadumbres de aquel tiempo difícil, que extraño tu presencia, tu voz serena y recia, la palabra justa que alentaba y calmaba a un tiempo y ese cariño regalado que nunca me faltó. 

Hoy te recuerdo, mamá, aunque nunca te olvidé.


Feliz día a todas las mamás.