El sueño de la colina
Yo siempre tuve un sueño, subir aquella colina y conquistar el castillo.
Recuerdo la primera vez que lo intenté, tenía ocho años. Eran las vacaciones de verano y toda la pandilla de amigos subía la colina con desmesurada agilidad hasta llegar a lo alto, a las ruinas del viejo castillo. Yo miraba desde abajo incrédulo y acobardado, fue entonces cuando todos se decidieron a animarme con un interés y un entusiasmo como sólo los niños y los amigos son capaces de dar. Resuelto a intentarlo rechiné los dientes y me lancé a la conquista de la colina.
Los dos primeros metros de subida fueron los más complicados, también los únicos. Con las manos y los brazos apoyados en las muletas hacía toda la fuerza sobrehumana que me era posible para arrastrar la funda de hierro que mantenía firme mi pierna derecha. Fue inútil, entre los gritos desencantados del grupo que me miraba desde arriba, una de mis muletas resbaló entre una gravilla de piedras y caí pesadamente hacia abajo. La extensa muestra de rasguños por todo el cuerpo y las mordeduras de los hierros en la pierna fue el resultado de la hiriente derrota.
Al año siguiente, ya olvidado el episodio y con fuerzas renovadas, volví a intentarlo. El resultado fue el mismo. Lo habitual tras el doloroso escarmiento era esperar abajo, a los pies de la colina, lanzando piedras a los guijarros y a los pájaros hasta que ellos, mis amigos, se cansaban de jugar al escondite entre aquellos muros descascarillados y bajaban la ladera incansables y a toda prisa. En los dos años posteriores insistí, con más tesón que sensatez, en realizar nuevos intentos, todos ellos acabaron en los acostumbrados descalabros. Durante muchos años cedí a la lógica absurda de que nunca alcanzaría la colina. Hoy sólo sueño con romper esa lógica y conseguir que esa colina, algún día, por fin sea mía.
Y hoy es el día que quiero hacerlo realidad.
Me alegro mucho que hoy sea el día y que nunca, el protagonista, haya dejado de intentarlo.
ResponderEliminarEn el comentario que dejaste en mi blog, creo que entendiste mal, en ningún sitio pongo que Rajoy significa palillo, siento la confusión.
Palillos en gallego es escarvadentes. Rajoy es un apellido castellanizado que no sé lo que significa, porque en gallego es Raxoi.
Bicos
Hola Dilaida, gracias por el comentario y siento la confusión.
ResponderEliminarEn cuanto al relato del jueves, no sabía si decirlo, pero lo voy a hacer. En realidad es el preambulo, ligeramente modificado para darle sentido en lo que quería expresar, de una historia mucho más extensa que acabo de terminar de escribir. Confío en colocarla en unos días.
Un abrazo
Cabría entonces sumarse al deseo de que nunca te des por vencido!
ResponderEliminarEl hecho de no haber llegado, no quiere decir que no sea posible -ni muy digno y valioso el intento!-
Un abrazo.
Qué buen relato, sobre todo cuando aparece la muleta, la pierna, etc., es una forma de ir introduciendo los elementos definitorios del relato poco a poco, y de ir construyendo el texto dando paulatinamente todos los aspectos, no sirviéndolos desde el primer momento. Un mal relato es aquel que en la primera línea ya lo sabes todo: está bien pues que evites eso. Y, por la extensión, casi podría considerarse un microrrelato. Muy bueno.
ResponderEliminarPor eso vivimos, sobrevivimos y supervivimos... Por el tesón y por los sueños.
ResponderEliminarQuizás ese sea el secreto: "Hoy es el día en que quiero hacerlo realidad". Magnífica oda a la esperanza, a los seños.
Besitos
Los sueños como torres altas, a veces parecen insuperables, pero todo lo puede el sueño del querer, del persistir, aunque no se alcance la cima, vale la pena soñarlo, vale el esfuerzo como el mejor premio.
ResponderEliminarY en esos sueños deberíamos insistir, no claudicar, cada cual con sus muletas.
Besitos.
No rendirse nunca, seguir insistiendo aunque a veces se pare para descansar, no dejar los sueños perdidos o inconclusos, esa es la idea.
ResponderEliminarMe alegro que hayas decidido que hoy ese día, seguramente lo vas a lograr.
Un beso.
La vida es una carrera de obstáculos. Metas que alcanzamos con mayor o menor facilidad, Algunas de esas metas posiblemente nunca las logremos, pero si están a nuestro alcance, debemos intentar conseguirlas siempre. Cuanta mayor es la dificultad, mayor es la satisfacción por el logro obtenido.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bellísimo relato. Sin desfallecer, siempre hay que seguir soñando...Bien. Muy bien.
ResponderEliminarUn saludo.
No es fácil que lo haga, pero si, a veces me doy por vencido...
ResponderEliminarSalud
no es fácil poner un comentario, sobre todo cuando hay comentarios que ya han expresado con claridad tu idea al respecto, ¿quien no ha soñado con alcanzar, todo aquello que le gustaria realizar, trabajar, componer, escribir, dibujar? los sueños se consiguen a veces, pero el camino hasta llegar a ellos, es duro y complicado, sin esfuerzo, es duro alcanzarlos, pero creo que estás llegando a lo alto de la colina, para volver a bajar y volver a subir las veces que haga falta,,,
ResponderEliminarsaludos
Habrás notado que, al menos hoy, he claudicado.
ResponderEliminarY cuando tengo sueños, vienen los monstruos de mis pesadillas y me los quitan de un plumazo.
Muy dulce tu comentario en el mío... pero no.
No se han cumplido y tampoco duermo bien.
Baci, amigo
Me encanta esta entrada de hoy, me ayuda a comprender que los sueños sean cual sean por mas difíciles que parezcan hay que perseguirlos hasta el fin.
ResponderEliminarMil gracias.Un beso
Con ese hoy es el día en el que el que comienzo lo dices todo. Desear y conseguir muchas veces no van de la mano, pero hay ocasiones en las que no desfallecer en el intento si hace posible esta unión y puede verse hecho realidad nuestro sueño.
ResponderEliminarÁnimo y a por el Jose Vicete.
Un abrzo.
Qué sea toda tuya, por difícil que parezca, nada puede ser más grande que no puedas vencer con tu perseverancia. Besos, muchos.
ResponderEliminarSueño recurrente... sueño de conquista, un sueño hasta diría yo... erótico, de placer y de aventura... no erótico por lo sensual o lo sexual... sino cargado de sensaciones que comprendan abarcar lo otro...como un enamoramiento a esa colina. jeje... me gustó mucho. un abrazo!
ResponderEliminarLeyéndote, tal cual están las cosas, me desespero menos. Yo me liaría a palos con la colina a base de muletazos.
ResponderEliminarUn abrazo.
En cierto sentido, publicar esta historia es hacer realidad el sueño de subir a esa colina.
ResponderEliminarY sobre todo, nunca dejar de intentarlo.
Un abrazo
Muy buen micro, José Vicente, pero que muy bueno.
ResponderEliminarMe ha gustado de principio a fin. Su tono narrativo, su distanciamiento, sin autocompasión, e incluso su final sin alharacas, pero heroico, me parecen muy acertados.
Te felicito, amigo, un gran micro lleno de jugo que incide sobre la minusvalía de una forma muy poderosa y sugerente. Además, despierta la ternura hacia el narrador y eso es impagable, me encanta.
Un abrazo.
mientras allá vida nunca es tarde para hacer realidad un sueño...
ResponderEliminarmientras allá vida nunca es tarde para hacer realidad un sueño...
ResponderEliminarVerdadero tesón tiene el protagonista con la colina, como una historia de amor y de conquista. También lo veo un poco como la utopía que sirve para caminar, pues los sueños son así, sirven para intentarlo cada vez. Me ha gustado el mensaje que transmite :) y la como está contado.
ResponderEliminarUn abrazo compañero juevero ;)))
Dicen que los sueños sueños son, pero también es cierto que quien la sigue la consigue, y eso es lo que debió pensar el protagonista de tu relato. Sin duda, no es fácil, hay que caer y levantarse una y otra vez hasta conseguirlo, pero nunca desistir ni tirar la toalla. Yo me quedo con ese mensaje de constancia.
ResponderEliminarComo en tu relato, todos intentamos subir muchas cuestas sin contar con todas las posibilidades. La vida es ese desafío, porque todos necesitamos de alguna muleta para subir el empinado camino que se nos presenta frente a algún sueño. Lo que diferencia a "tu protagonista" de los demás, es ese tesón, esa fuerza de voluntad, que seguro algún día lo harán estar en la cima!!!
ResponderEliminarConmovedor relato, que sirve de ejemplo para alguna vez, en que todo nos parece difícil o nos ataca la pereza...
Besos y abrazos mil. Siempre es muy grato leerte.
Aunque ese sueño parezca imposible, tal vez un día se haga razorealidad, la voluntad mueve montañas.
ResponderEliminarUn ab
Jose Vte, un relato magnifico, en su forma y en su contenido.
ResponderEliminarEse sueño, tu protagonista, no dejará de alcanzarlo pues la mente es la que tiene la fuerza....y
¡claro que va a ser hoy el dia!
Recibe un abrazo, que ya queda menos para hacerlo realidad....esa es una pequeña "colina", también.
No puede uno resistirse a seguir soñando, hay que volver con ansias renovadas a intentarlo, hoy es el día, la cima será al fin suya, no importa el tiempo que pase hasta que lo consiga, nadie dijo que fuera fácil alcanzar los sueños.
ResponderEliminarMuy buen relato, las incapacidades llevan junto con sus limitaciones una fuerza de voluntad desmesurada en las personas que las padecen para su superación, por lo general son grandes luchadores.
Un abrazo fuerte.
De este sueño destacaria un detalle "todos se decidieron a animarme con un interés y un entusiasmo como sólo los niños y los amigos son capaces de dar", quizás esa actitud de apoyo de los amigos facilitó que ese sueño siga vigente.
ResponderEliminarUn abrazo
Construimos la vida a base de muchos pequeños sueños, algunos los materializamos y otros no.
ResponderEliminarEstos que no se realizan, como tu nuy bien narras, son motor y estímulo de nuevos intentos, de nuevas perspectivas, aunque el sueño sea el mismo.
Muy buena interpretación del tema. Clara y próxima.
Abrazos
Tú has alcanzado muchas colinas y conquistado muchos castillos, porque eres un eterno soñador. Y déjame decirte algo importante: "No hay espectáculo más bello que un hombre luchando contra la adversidad", lo demás es currículum.
ResponderEliminarUn abrazo y hasta pronto.
es curioso, josé vicente, nunca conocí a un niño con sueños...o lo que es lo mismo, no tengo conciencia de ello. siempre estos sueños los leí en libros o en relatos como este tuyo...ello dice poco d emí , o mucho...que soy un olvidadizo de los mil demonios...el caso es que estos sueños me seducen en el interior y suelo soltar algo así como una pequeña lagrimita que quiere slair y se queda ahí, al borde...ese borde mismo donde se me ha quedado al leerte, con lo cual, te lo puedo asegurar, puedo definir este sencillo relato como estupendo, pues aquel relato que provoca en el lector un algo, ese ya es bueno...
ResponderEliminarmedio beso.
Supongo que esa colina siempre estará ahí, desafiando y mostrándose soberbia... Tal vez el tesón, las fuerzas y los sueños son los que un día le digan que hay otras colinas aquellas que se suben por que están a la mano de uno y dan muchas mas satisfacciones...
ResponderEliminarBuena tu aportación.
Besos
Un relato estupendo como todos los tuyos. ada día se te lee con más satisfacción, siempre los espero.
ResponderEliminarPuedes sentirte orgulloso, tu particular colina ha sido conquistada por ti en el justo momento
Un abrazo
"Unas veces me siento
ResponderEliminarcomo pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas".
Tú transmites ánimo e ilusión por continuar: escribiendo y creyendo en uno mismo y en los demás.
Me encantó José VIcente.
un fuerte abrazo
Fantástico sueño y fantástico jueves. Me encanta la narrativa, tan fluida y bien lograda. Es un texto lleno de una tenacidad emotiva que se ve claramente reflejada en el subir constante de esa colina.
ResponderEliminarUn abrazo rezagado.