¡¡¡Inocente-Inocente conseguido!!!

Después de un fin de semana glorioso en lo negativo. Después de aguantar el penúltimo birlamiento madridista con ridícula, faltona y desagradable celebración del impresentable santero Mourinho y los comentarios y comentaristas partidistas habituales. Después de ver como el futuro de España se llena de negros nubarrones infestado de gaviotas por todos los rincones de ésta sufrida piel de toro, gracias, sobre todo, a todos aquellos que pretendían ver que todos son iguales y ahora andan gimiendo por las esquinas. Por fin, como un lunes revelador sale una buena noticia, que quizá no le importará mucho a la mayor parte de la gente, pero yo aposté por éste asunto hace un par de semanas y ahora tengo que congratularme del éxito:

Josele y María han conseguido el reto de Inocente- Inocente.

Esta es la nota que les han enviado, copiada de la pagina web de Josele:

Hola amigos, quiero compartir el mail que acabo de recibir de La Fundacion Sant Joan de Deu…leedlo por que todos formamos parte de él…. simplemente …. LO HEMOS CONSEGUIDO ¡¡¡¡
GRACIAS ¡¡¡¡¡
Estimad@s amig@s:
Desde la Fundación Inocente, Inocente tenemos el placer de comunicaros que la historia / proyecto del voluntario José Carlos Ferre Pérez, presentado por vuestra entidad Fundació Privada per a la Recerca i la Docencia Sant Joan de Deu , ha sido seleccionada por la Comisión Técnica como finalista de la campaña “Ayúdanos a encontrar historias de personas extraordinarias” y, por tanto, el Proyecto Apoyo a la Investigación del Síndrome de Rett, en el que colabora este voluntario, será beneficiado con una subvención económica por importe de 30.000 euros que irá destinada a su financiación.
TODOS EMPUJAMOS EL CARRO ¡¡¡¡¡

Muchas gracias a todos los que os pasásteis por allí para colocar vuestro comentario. Como bien dice Josele, ¡Todos hemos ayudado a empujar el carro!

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A vueltas con la solidaridad

Dicho esto, con toda la alegría del mundo, tengo que referirme a un comentario, porque viene a cuento, que colocaron en la anterior entrada, supuestamente por la persona que provocó que mi coche se lo llevara la grúa por aparcar en una zona reservada a personas con discapacidad, de la cual tengo tarjeta, pero que dicha plaza era de su propiedad:

Anónimo dijo...

soy dueño de un 4x4 que parece un mamout ,me quedado sorprendido al ver tus comentarios tan solidarios .despues de leer detenidamente todos los comentarios de todos,me he dado cuenta de que nadie conoces las normas ni nadie es tan buenos como dicen todos.

Esta fue mi respuesta

Contestarle a este anónimo, una forma valiente de presentarse, y más para hablar supuestamente de solidaridad.
Intuyo por ese inicio que pretende apelar a una entrada que hice sobre una multa que me pusieron por aparcar en una zona de un discapacitado con plaza propia, que tu eres esa persona.
De entrada permíteme que dude que seas tú, pero en el hipotético caso de que lo seas, no se a que viene hablar de mi supuesta solidaridad, si no me conoces, salvo los días que te veo pasar delante de mí, cuando voy al curso, sentado en tu silla de ruedas. Ni tú te has vuelto a dirigir a mi, ni yo a ti, así es que no me conoces de nada como para insinuar nada.
He puesto el enlace que lleva a la entrada donde explico lo que ocurrió. Y fue así como sucedió, tal y como lo cuento.
Mi solidaridad, en el caso de que la tuviera, no creo que tenga nada que ver con los 241 € menos que tengo actualmente en el bolsillo por aparcar donde de justicia creía que me correspondía, y cuando me conozcas un poco, hables conmigo o con personas de mi entorno, entonces podrás comentar sobre mi forma de ser.

Y si tu no fueras esa persona, si que debes de ser alguien con muchas ganas de hacer daño gratuitamente. Pero si a ti te vale, a mi me da igual, yo si que se lo que soy.

Quería ampliar el comentario y añadir sobre “mi supuesta solidaridad”, como apela el anónimo. Yo de entrada no me considero más o menos solidario que nadie. Si trato estos temas de personas en riesgo de exclusión social o con problemas por sus condiciones físicas, no es por solidaridad, si no por empatía. Como ya sabrán la mayor parte de los que me leen, yo soy discapacitado, tengo polio en la pierna derecha que con el paso de los años se ha ido agravando con otros problemas derivados que me han dejado unas secuelas irreversibles. Resultado, ahora tengo que caminar ayudado por un bastón y durante escaso trecho, perdí el trabajo que tuve durante 25 años, especializado en diálisis. Ahora tengo reconocida una discapacidad total para mi trabajo y tengo concedida una pensión del 55% . Así de simple

También tengo que decir que a la mayor parte de las personas y los casos que he traído aquí, no los conozco de nada. Ni siquiera a Josele y a María, que es el caso que me ocupa en esta entrada. Conocí su historia gracias a Tania Mansilla, una antigua compañera del taller de empleo donde estoy ahora que les hizo un reportaje periodístico, me interesó muchísimo el tema y le pedí publicarlo en mi blog. Mi trato con Josele se limita a un par de correos que nos hemos cruzado a raíz de aquella entrada y nada más. Ni los conozco en persona ni creo que tenga muchas oportunidades de poder hacerlo. Yo no suelo ir a ver carreras de maratón, si que me interesa el motivo que le mueve a hacerlo. Aunque no niego que me gustaría conocerlos, sobre todo a María. 

Perdonad la personalización de esta segunda parte de la entrada, me veía en la necesidad de hacerla, más que nada porque aquí al lado luzco orgullosamente el premio que me concedió Encarni y porque hay cosas que no puedo permitir. Ya he dicho que no creo que esa persona que llamó a la grúa sea quien ha colocado el comentario, lo averiguaré preguntándoselo directamente. Si que me gustaría que quien lo haya escrito, sea quien sea, se sienta un poco mal, por lo menos mientras lea esto.