Mis tiempos de discoteca en 4 canciones

Enero mes de la música, un buen puñado de blogueros hemos decidido sacar el tocadiscos y dedicar el mes de enero a la música. Es una propuesta que hicieron Aro y Mamé Valés en un comentario a propósito de una entrada de Mª Jesús Paradela que rememoraba momentos musicales, y que está teniendo un eco bárbaro.

Aquí va una primera entrada mía, dedicada al asunto musical, como probablemente haga alguna más, porque me es imposible seleccionar una única canción, he decidido dedicar ésta a hacer un pequeño homenaje, en cuatro canciones, a aquellos 70 cuando nosotros empezamos a descubrir las discotecas y la música que allí sonaba, así es que:.

¡Luces, música y a bailar! 

Mis primeros tiempos de discotecas fueron allá por mediados de los 70. Eran aquellos tiempos de pelos largos, chaquetas entalladas, pantalones de pata de elefante y zapatos de plataforma. Hoy queda algo hortera, pero es lo que había, era la moda. Eran tiempos de pandillas, de discotecas cutres en los pueblos de los alrededores de Valencia, donde los jóvenes de quince y dieciséis años, que éramos bastante cafres, nos lanzábamos con aquellos bailes imitando el tocar de la guitarra dando saltos enloquecidos, y que llevaban,  inevitablemente a peleas, un domingo si y otro también. Lugares como la Pista de Manises, ó la 61 de Chirivella, fueron testigos de aquellas nuestras primeras carreras delante de aquellas hordas de melenudos y grandes patillas detrás nuestra, con ganas de patearnos el esternón, por haber cometido el delito de haber rozado con la mano que hacía de mástil de la guitarra a alguno de ellos, o simplemente por haber saludado con un ¡hola! a la “chavala” de algún otro.

La música que estaba de moda en aquellos antros, era la que con el tiempo ha derivado en infinidad de nombres, pero para nosotros entonces era simplemente rock duro, y su máxima expresión eran Deep Purple

(Esta va en homenaje a mi hermano Jesús, gran seguidor de Deep Purple y de Ritchie Blackmore, su guitarrista)

Deep Purple - Highway Star

 

En cuanto ya tuvimos edad suficiente y algo mas de dinero, subimos de nivel en el mundo discotequero. Nos refinamos y empezamos a frecuentar las discotecas de Valencia capital, donde la mayoría eran de mayor categoría, tanto de los locales como de la música. Sin olvidar que el tipo de garrafón que nos daban, precursor de los actuales botellones, también era de mayor calidad. Primero en la mítica discoteca Charly, de la calle Pepita de Valencia, que tampoco se puede decir que fuera el no va más de la exquisitez. Y por fin, J'aypur, aquello si que era ya calidad, diríase que la estrenamos nosotros, el grupo de colegas, y prácticamente no faltábamos ni un solo domingo, entonces era el no va mas, y desde luego allí ponían la música, que en cuestión de discoteca, estaba mas a la última.

Era la explosión musical de Donna Summers, Gloria Gaynor, y como no de Boney M…

(Como no rendir homenaje a Bobby Farrel recientemente fallecido)

Boney M – Ma Baker

Fueron aquellos los tiempos de la música romántica, sobre todo de la canción italiana. Sandro Giacobbe y el “Jardín Prohibido”, Gianni Bella y “De amor ya no se muere” ó  Richard Cocciante y su “Bella sin alma”

Supongo que muchos nos acordaremos de cuando llegaba el momento del “lento”, y todos, chicos y chicas, pero sobre todo nosotros, los chicos, nos dedicábamos a dar vueltas a la pista de baile, buscando alguna chica que quisiera dar unos pasos de baile agarrado, intentando siempre, por nuestra parte, que fuera lo mas apretujado posible. Probablemente fue allí, en aquellos difíciles trances del ligoteo, cuando se produjo el nacimiento del ya para siempre famoso ¿estudias o trabajas? pregunta mágica con la que romper el hielo y entablar una, generalmente efímera amistad, lo que duraba una canción, o lo que en aquel momento se terciara.

Claudio Bagnioni – Sábado por la tarde

Un dia, y por casualidad, nos dejamos caer por la discoteca JJ. Cuando llegó el momento de empezar a dar vueltas a la pista de baile como posesos, a la caza del pasajero ligue, como seguía estando de moda. Empezamos la ronda interrogatoria con la esperanza de que hubiera suerte en ese sitio que era nuevo para nosotros..Al cabo de varias e infructuosas vueltas, que por otra parte era lo habitual, me fijé en una chica con aspecto de tímida que estaba sentada en una mesa tomando alguna bebida, estaba acompañada por una amiga (luego supe que también rondaba por allí su hermana), y allá que fuí a probar suerte. Tuve que insistirle bastante mediante el socorrido ¿estudias o trabajas?, además del ¿vienes mucho por aquí?, hasta que conseguí vencer su resistencia y logré llevarla al huerto, quiero decir a la pista de baile.

Desde aquel día ya nunca más he logrado quitarme de encima a aquella jovencita de aspecto tímido.

También recuerdo que en aquel momento en que empezamos a bailar por primera vez, la música que sonaba en la pista de baile de la discoteca JJ era esta…

Chicago - If You Leave Me Now