Aquellas pequeñas cosas

Por medio del correo enviado por un buen amigo, compañero de fatigas de retoques, pinceles, vectoriales, y piconeras (¿eh, Pepe?) he podido conocer un estupendo sitio que paso a recomendaros.

Me gustaría pediros que antes de continuar leyendo, pongais el video que sigue a continuación que no es otro que la genial cancion de Joan Manuel Serrat " Aquellas pequeñas cosas", la intención no es otra sino que os acompañe por el recorrido de este artículo, así es que pulsar al play y seguir leyendo:






Evidentemente se trata de un sitio dedicado al recuerdo de nuestra niñez y de nuestra adolescencia, de los que ya hace mucho que peinamos canas, de nosotros que vivimos el final de una época, y el principio de otra, y que sin pretenderlo hemos sido testigos de una de las mayores transformaciones que ha tenido este pais en toda su historia, y de lo cual debemos de sentirnos orgullosos de haberlo visto con nuestros propios ojos y haberlo vivido en nuestras propias carnes.
Esas pequeñas cosas a las que se refiere Serrat son todos aquellos objetos, imágenes y vivencias que cuando vemos de nuevo, consiguen que nos pegue un brinco el corazón.


En verdad que te acechan detras de una puerta, como olvidarse de tantas cosas... de aquella televisión en banco y negro


Los Chiripitiflaúticos con el Tio Aquiles y su traje de tiroles, El Capitán Tán, y sus viajes a lo largo y ancho de este mundo, Valentina que era mas fina que una sardina, y sobre todo Locomotoro que era conductor de todo menos del codo, y que siempre nos intrigaba como podía doblarse tanto sin caerse. ( sin olvidar a los hermanos Malasombra, que eran malos de verdad)









La televisión solo duraba unas pocas horas, unas seis, desde las 6 de la tarde hasta las doce o la una de la noche. La mayor parte del tiempo solo estaba la carta de ajuste






Tambien había dibujos animados de los buenos, de la Warner con Bugs Bunny, el Correcaminos ( que ganas tenía que lo pillara alguna vez el coyote) Porky, también el pájaro loco, Popeye, y como no Micky y Donald, y todo el equipo de Disney y su mundo de colores



Luego ya algo mas mayores veíamos cosas como:





Cesta y Puntos, famoso concurso que emulando un partido de baloncesto participaban equipos de colegios.
Recuerdo que en una ocasión participó un primo mio de Madrid, aquello fue todo un acontecimiento






Gracias a Felix Rodriguez de la Fuente, (y al Comandante Cousteao) todos empezamos a amar la naturaleza y supimos que el lobo no era el monstruo de los cuentos, si no una víctima





Antes que Farmacia de Guardia, Médico de Familia, Verano Azul, incluso antes que Hospital Central o Aqui no hay quien viva, existió Cronicas de un Pueblo, que a todos nos tenía enganchados.
No es que fuera una buena televisión, es que era la única, y quizá por eso la recordamos con cariño a pesar de todo





La escuela, desde luego, en muchas ocasiones la tuvimos que sufrir, escasos medios, instrucción casi militar, cuantas formaciones hicimos en el patio del colegio Gregorio Mayans de Mislata, cantando el cara al sol, con el brazo en alto, y frente a las banderas de falange, carlista y nacional, la anterior del aguilucho, por supuesto. Los sábados por la mañana, eran formaciones mas largas, y mas festivas, y ademas de los himnos pertinentes, rezábamos. Como eran tiempos de escaseces, muchas mañanas nos daban unos botellines de leche, que yo, todo hay que decirlo, la recuerdo como de las mejores que he bebido.





Los libros de el parvulito, que eran nuestras primeras lecturas, y actividades, y donde ya empezaban en nuestro adoctrinamiento. También eran constantes los ejercicios con los cuadernos Rubio para mejorar la letra, aunque conmigo no lo consiguió, porque tengo una letra de lo mas fea.










Las Enciclopedias, donde estaba reunido todo el saber que necesitábamos, tenía su parte de geografía, de historia, de lengua, y hasta de matématicas, como bien muestra la imagen del libro.

















Luego sería el libro de Unidades Didacticas, pero ya entonces habían otros que le acompañaban









Por supuesto el libro de catecismo no faltaba nunca, la educación religiosa era primordial. Yo tengo que reconocer que era lo que mejor se me daba, y que hasta me gustaba. Tenía un halo de misterio e historia que siempre me había fascinado ( eso sin contar mis muchos años de monaguillo en la iglesia de San Francisco de Asis de Mislata, con Don Carlos, que todos los veranos nos llevaba algunos dias a la piscina de Torrente que llamabamos la piscina del cura, en su Seat 600 azul oscuro)

Este libro quizá no sea muy conocido, pero lo cito aquí, porque recuerdo que lo tenía mi padre, supongo que aun lo tiene, aunque hace mucho tiempo que no lo veo, trataba sobre las conquistas españolas en América, ensalzandolas con gran mitificación. Recuerdo que tenía algunas grabados realmente espeluznantes, de los salvajes indios asando y comiéndose miembros amputados de los valientes conquistadores.









Seguro que todos recordais el mapa industrial, donde nos enseñaban que en Valencia solo habían naranjas, en Canarias plátanos, y que por el centro había mucho mercurio y mucho trigo.






El mapa político, nada tenía que ver con el que hay ahora.
El Pais Vasco no existía, y mucho menos Euzkadi, eran las Vascongadas, tampoco el Pais Valenciano, ni siquiera la Comunidad Valenciana, si no que era el Levante Español, y mas de media España estaba repartida entre Castilla la Nueva y Castilla la Vieja









Cuando, por fin, salíamos del colegio, nos cogíamos un trozo de pan con chocolate, o de nocilla, o de mantequilla de tres colores, y como posesos nos íbamos a la calle a jugar durante horas, hasta que nuestra madre nos llamaba desde el balcon, o hasta que era de noche y había que irse a cenar, pero la calle si que era nuestra.








Cuando podíamos nos íbamos al kiosko a comprar alguna que otra chuchería, como pipas o los chicles bazoka, que llevaban en el envoltorio los escudos de los equipos de futbol, o un cromo de otro tipo











También la gaseosa La Casera traía en la bolsita cromos de la liga de futbol, y es que era una pasión













En lo que respecta a coleccionar cromos, a parte de los de fútbol, yo creo que el verdadero rey siempre ha sido esta colección, mítica, de Vida y Color. ¡Que cromos mas chulos!








Las niñas tenían sus propios recortables, para hacer vestiditos a las muñecas de cartoncillo...








...Y los niños nuestros recortables, de guerra, o de indios y vaqueros








¿Quien no habrá jugado en alguna ocasion con los juegos reunidos Geyper?, es que aun no habían ni Cluedos, ni Monopolys, ni Trivial Pursuits




Leíamos tebeos, que no comics, de Jaimito, Pumby, Pulgarcito, TBO, y desde luego de Roberto Alcazar y Pedrín ( que luego, con el tiempo, nos parecíó sospechoso que a ninguno se le conociera mujer alguna, y si una amistad sin fisuras, entre tanto puñetazo, corcholis y toma del frasco Carrasco) , y desde luego el Capitán Trueno, para muchos, junto a Mortadelo y Filemón el mas grande de los personajes de los tebeos que han dado las Españas








Aunque a mi que me perdonen si cometo un sacrilegio, pero yo siempre he sido mas de El Jabato, quizá porque era mas "hispano", aunque recorría menos mundo, pero a mi el gigante Goliat, su contrapunto Fideus, siempre con su lira a cuestas, y el encanto de Claudia, la eterna novia del Jabato, que era mas de ir por casa, ya que era hija de un, creo recordar, patricio romano, pero no era una fria y rubia nórdica como Sigrid la novia de el Capitán Trueno






Y como nos podemos olvidar de CinExin, el cine sin fin, tenías que estar girando una manivela para poder ver una pequeña películita de dibujos de apenas un par de minutos, nada que ver con los potentes ordenadores personales que hoy disponen. Aquí si que no creo que haya color... ¡por Dios, que pobreza de medios teníamos!








¿Cuantos cambiaríamos los dulces, perfumados, coloristas y suaves papeles higiénicos de hoy en dia por el espeso, seco, duro y rasposo papel del elefante? ... ¡Joder que escozor!












Esto, por supuesto, no pertenece a mi niñez, pero es que ha pasado conmigo tantos años, y hemos sido tan inseparables, que no me resisto a colocarlo como uno de mis mas entrañables recuerdos



El sitio al que me refería al inicio de este artículo, se llama "El desván de Rafael Castillejo", y podéis entrar por medio de este baner

Es un sitio que me ha gustado mucho, y que recomiendo vivamente, ya que no solo tiene mucho material de aquellos años, si no que está bien estructurado, hay otros muchos sitios, pero la mayoría son blogs, y son mas difíciles de estructurar de una forma armónica que una pagina web. Pero bueno, iré presentando de cuando en cuando algunos, porque, seguramente continuaré con artículos como este, ya que me lo he pasado muy bien haciéndolo.

Espero que os haya gustado, yo como digo he disfrutado mucho haciéndolo. De vez en cuando es bueno volver la vista atras, con mesura, pero con ilusión, porque lo que hemos vivido es nuestro, y siempre habrá algo, alguna cosa, algún objeto, algun pequeño detalle que nos lo evocará, y como dice Serrat ( ¡¡¡Dios, que grande es!!!). Ni el tiempo ni la ausencia los mata, los recuerdos te acechan detras de cualquier pequeño detalle, y por último es inevitable que, de vez en cuando, nos hagan sonreir, quizá con cierta tristeza, y hasta puede que soltemos alguna lagrimilla al darnos cuenta de que esos tiempos ya no volverán, pero no debemos de avergonzarnos, porque eso no es malo, es humano

Aquellas pequeñas cosas
(Joan Manuel Serrat)

Uno se cree
que las mató
el tiempo y la ausencia.
Pero su tren
vendió boleto
de ida y vuelta.

Son aquellas pequeñas cosas,
que nos dejó un tiempo de rosas
en un rincón,
en un papel
o en un cajón.

Como un ladrón
te acechan detrás
de la puerta.
Te tienen tan
a su merced
como hojas muertas

que el viento arrastra allá o aquí,
que te sonríen tristes y
nos hacen que
lloremos cuando
nadie nos ve.