viernes, 25 de octubre de 2019

Dignidad y justicia poética

Franco visita el Valle de los caídos (1959)    Jonas Salck administra la vacuna de la polio (1955)

Hoy han sacado a Franco del Valle de los Caídos, y la casualidad ha querido que fuese un 24 de octubre, el día dedicado a recordar la lucha contra la poliomielitis. Aquella parálisis infantil que su negligencia de dictador supremo provocó a miles de niños.

Franco hoy ha salido de su basílica, esa enorme cruz megalómana que construyó con el sudor y la sangre de cientos de presos esclavos republicanos, y financiada con un dinero que nunca quiso emplear en salvar a los hijos de la que era “su” España, ocultando una vacuna que ya existía y que nos podría haber salvado a la mayoría de aquellos chiquillos.

En este 24 de octubre reivindicativo, los caminos de aquel régimen opresor y los supervivientes de la polio se han vuelto a juntar, y ya para siempre. Sin duda nos ha quitado algo de la escasa visibilidad que aún nos dejan conservar, pero también, y de alguna forma, que Franco haya salido de aquel lugar de horror precisamente hoy indica que, por fin, la dignidad nos pone rostro a nosotros, los niños de la polio; esa dignidad transformada en algo parecido a la justicia poética. 

24 de octubre, Día Mundial Contra la Polio

4 comentarios:

  1. Conmovedora entrada. Digno reconocimiento. Un abrazo

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  2. Y pensar que aún hoy hay muchas personas que lo añoran es incomprensible .
    Un abrazo José Vte.

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    1. Incluso algunos afectados de polio, enfermos por aquella criminal negligencia, lo justifican.
      Es bastante alucinante.
      Gracias y muchos besos Pakiba.

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